Alexander Zverev mostró carácter y regularidad para superar el duro escollo que representaba Carlos Alcaraz, la gran aparición del tenis en esta temporada y que llegaba como uno de los favoritos a ganar el título en Roland Garros.
El alemán, Nº 3 del ranking mundial, hizo uso de su mayor experiencia y actuó con temple y precisión para imponerse en un partido de enorme ritmo frente al joven de 19 años. Así, festejó la clasificación con un marcador de 6-4, 6-4, 4-6 y 7-6 (9-7) en 3 horas y 18 minutos de juego sobre la arcilla de la Philippe Chatrier.
El tenista germano se adjudicó un alto porcentaje de puntos a la hora de jugar con el primer y segundo servicio durante el primer set y el único quiebre capitalizado en tres ocasiones le permitió adelantarse en el resultado. Misma fórmula repitió en el segundo al impedir que el español capitalizara alguna de sus chances de break.
Ya en el tercero, el envión anímico del nacido en El Palmar pareció poner en aprietos a su rival y amenazó con extender la historia tras llevarse el tercer parcial. Pero fue allí cuando se percibió su ansiedad e inexperiencia al desaprovechar oportunidades de set preciadas y fallar en golpes decisivos.
Esas cualidades sí las tuvo Sascha Zverev, quien acertó cuando debía, estuvo frío y soportó los peloteos intensos y cerró el match con un espectacular revés paralelo. Con 7 aces, 71% de puntos ganados con su primer saque y 34 errores no forzados contra 56 del español, el nacido en Hamburgo estableció las diferencias (en winners dominó Alcaraz con 46 vs. 39).
El jugador de 25 años, que aún tiene como deuda ganar un Grand Slam, avanza de manera seria y espera ahora por el vencedor del duelo entre Novak Djokovic y Rafael Nadal, en un costado del cuadro que luce como el más fuerte respecto del inferior y del que, parece, saldrá el campeón.(D)