Saquicela está a un paso de la Presidencia

Con miras a una posible sucesión a la presidenta Guadalupe Llori (Pachakutik, PK), el primer vicepresidente, Virgilio Saquicela (Ind.), actúa más cerca de la oposición que del oficialismo, del cual era un poderoso allegado.

“No soy un político improvisado -señala Saquicela-. Fui concejal de Azogues, capital de Cañar, e incluso fui su Alcalde en el periodo anterior, por el movimiento Creo. Tuve la posibilidad de apoyar en varias campañas electorales al hoy presidente Guillermo Lasso”.

Aun así, en este periodo llegó al Parlamento como asambleísta de Democracia Sí. Cuando César Monge (+), director de Creo asambleísta de esa tienda, armaba la mayoría parlamentaria que le diera gobernabilidad Lasso, llamó a Saquicela. Así se creó el Bloque de Acuerdo Nacional (BAN).

La alianza

Monge hizo alianza con Pachakutik y puso como a presidenta de la Asamblea Guadalupe Llori; y a su amigo Saquicela, como primer vicepresidente. Creyó que así aseguraba un apego al Ejecutivo si, en algún momento, Lllori tuviese comprometida su continuidad al frente de la Asamblea. Tanta era la confianza, que no se concretó que Marcelo Cabrera fuera el primer vicepresidente de la Legislatura y pasara al Ejecutivo, como ministro de Transporte Obras Públicas.

Cambio de posición

Las cosas han cambiado. Monge falleció por un cáncer agresivo, y Llori está en la cuerda floja. La acción legislativa de Saquicela ha sido determinante: el consejero presidencial Diego Ordóñez lo ubica como protagonista del archivo de la Ley de Inversiones, al haber dado paso a la moción cuando ni la Presidenta ni el ponente se encontraban presentes en el hemiciclo.

En el trámite de la reforma para el incremento salarial a los maestros y en la resolución de las amnistías, difirió con el oficialismo. Aseguró que no estaba dispuesto a acatar órdenes vía WhastApp.

También se apartó del BAN, al cambiar el orden de la calificación de los juicios políticos al Consejo de Participación Ciudadana (Cpccs), en función de las prioridades del PSC y el correísmo.

La votación de la discordia

El 1 de abril se juntó con la bancada del correísmo, el PSC y la facción radical de Pachakutik, cuando intentó reinstalar la sesión del Pleno que un día antes había sido cancelada por Llori, para la activación del proceso de destitución.

Nathalie Arias (Creo) dice que a Saquicela le seduce la idea de convertirse en el nuevo presidente, y que desde hace algún tiempo presionó al BAN para que respaldara la salida de Llori “de cualquier forma”. Él sostiene que todos deben estar dispuestos a la evaluación.

“La señora Presidenta ha sido incapaz de tender puentes en la Asamblea, llegar a diálogos, consensos y resolver los temas. Yo permaneceré independiente cumpliendo las funciones de primer vicepresidente y legislando”, dice Saquicela, doctor en Jurisprudencia y político de la provincia de Cañar, de 48 años de edad.

El miércoles, cuando tomó el control de la sesión del CAL, tuvo un altercado con el secretario de la Asamblea, Álvaro Salazar, a quien mandó a callar. Al día siguiente fue expulsado del BAN.

Si se implementa una comisión que evalúe a Llori y si es destituida del cargo de presidenta de la Legislatura, Saquicela es el primero en línea de sucesión para dirigir el Parlamento. Lo haría en la orilla de la oposición, lo que augura tiempos difíciles para la gobernabilidad del Ejecutivo.

 

Fuente: El Comercio

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