El buen trabajo de Raúl González Blanco en el Castilla no ha pasado desapercibido. El técnico del filial madridista declinó en las últimas horas, en consenso con el Madrid, una oferta del Leeds como posible sustituto de Jesse Marsch, despedido este lunes de su cargo. La mala racha de resultados han llevado a Víctor Orta, director deportivo del Leeds, a buscar nuevas alternativas en el mercado.
El conjunto inglés quería a toda costa entregarle el proyecto a Raúl, que se encuentra inmerso en plena pelea por el ascenso a Segunda con el Castilla. Sin embargo, el ‘timing’, según la leyenda y el club, no es el idóneo y eso le ha echado atrás. Raúl no quiere salir mal o a destiempo del club de sus amores.
En cualquier caso, su crecimiento como técnico es incuestionable y ya ha empieza a suscitar el interés de conjuntos importantes. No es la primera vez que se fijan en Raúl. Eintracht, Schalke y algún equipo español ya habían mostrado un interés. Tras unas temporadas de aclimatación a los banquillos, está siendo esta la de su explosión definitiva como entrenador.
El Castilla de Raúl es segundo en estos momentos en el grupo I de Primera Federacion solo por detrás del Alcorcón, con el que empató este fin de semana. El técnico fue el principal valedor de que se quedaran en la plantilla varios de los jugadores con los que poder abordar el ascenso. Su sueño es entrenar al primer equipo del Madrid en algún momento. Mientras eso llega, clubes importantes de ligas potentes se interesan por él para llevárselo ya.
Vía diario as