Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ha finalizado la gira que le ha llevado por Vietnam y China con una visita al presidente chino, Xi Jinping, en Pekín, ocasión que ha aprovechado para “reforzar la presencia de España en Asia” y afianzar las relaciones con un país con el que desea mantener una “agenda positiva” y al que considera “un socio de la Unión Europea”.
En declaraciones a los medios después de su reunión con Xi Jinping, Sánchez ha explicado que “Asia es un continente que está cobrando cada vez mayor protagonismo” en un contexto internacional cada vez más cambiante y ha destacado que China es la “segunda economía mundial“.
El presidente, primer mandatario que visita China tras el pulso arancelario con EEUU, ha definido al país asiático como “un país profundamente europeísta que ve a China como socio de la Unión Europea“.
Por eso, Sánchez ha apostado por seguir explorando las oportunidades de crecimiento en las relaciones bilaterales entre España y China. El presidente español, usando como pretexto el complejo contexto internacional, ha asegurado que “toca expandir horizontes, redoblar los esfuerzos para preservar la paz, la apertura y el avance en la lucha contra esos retos globales que no se detienen en nuestras fronteras”.
Sánchez se ha mostrado partidario de dejar al margen las tensiones arancelarias entre EEUU y China (este mismo viernes el país asiático ha aumentado los aranceles al 125%): “No debemos dejar que las tensiones comerciales se interpongan al potencial crecimiento de nuestra relación entre China y España, y entre China y la Unión Europea”.
Con un ojo puesto en las posibles negociaciones que España tendrá que sostener con EEUU en materia arancelaria, Sánchez ha dejado claro que “la política exterior de España no va contra nadie“, solo “a favor del entendimiento entre países, de la defensa del orden multilateral y del libre comercio”.
Las palabras del presidente tienen lugar después de que el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, cargase contra la cercanía de España a China en pleno pulso por los aranceles.
Por último, Sánchez ha insistido en la importancia de que exista una relación positiva entre la Unión Europa y EEUU, a quien considera “un socio histórico” y con el que se ha llevado una relación que “ha sido mutuamente beneficiosa”. En paralelo, también ha recalcado que le parecen clave unas relaciones “más equilibradas” entre la UE y China para “encontrar soluciones negociadas a nuestras diferencias” y “una mayor cooperación en ámbitos de interés común”.
China exportará cerezas y ampliará los productos del cerdo
Una de las primeras consecuencias de la visita oficial a China ha sido el acuerdo entre el Ministerio de Agricultura y la Administración General de Aduanas de China para que el país asiático comience la exportación de cerezas y se amplíen los productos porcinos exportados desde España.
Tal y como ha informado el ministerio en su página web, el acuerdo supone “la apertura” al país asiático de la exportación de cerezas durante tres años, tiempo en el que “el procesado, empaquetado, almacenamiento y transporte de cerezas destinadas a la exportación” será supervisado por el departamento que dirige Luis Planas, que también se encargará de “asegurar que solo las cerezas procedentes de los huertos registrados puedan entrar en el almacén de confección para su selección y procesado”.
En cuanto a la ampliación del catálogo de los productos porcinos que se exportarán, el ministerio destaca que tendrá una validez de cinco años pero prorrogable de forma automática por periodos de igual duración y que “el primer producto español exportado a China es la carne de porcino”, siendo en la actualidad “el 31% de las ventas de España” a China.
Fuente: Revista El Economista