Con ese contexto, en resumen señala que se tienen tres sanciones, la mínima es la económica, pero si reitera en la económica sin dolo viene la clausura y si reitera en la no emisión de las facturas con dolo, viene la acción penal. “Con la reforma lo que están haciendo es agravar las sanciones pecuniarias, pero la clausura y la acción penal no termina”, reitera.