El próximo 20 de enero Donald Trump tomará posesión como presidente de los Estados Unidos y el gabinete de secretarios, que le acompañará en su segundo mandato, está compuesto por varios de los mayores patrimonios del país. Hasta el punto de que la suma de todas sus fortunas (668.000 millones) casi equivale al valor total de la capitalización del Ibex 35.
A medida que se han ido confirmando los componentes de su equipo, ha quedado refrendada la teoría de que Trump quiere grandes empresarios y hombres de negocios de éxito para gobernar la principal economía del mundo. Por ello, hasta once de sus hombres (y mujeres) de máxima confianza cuentan con varios miles de millones de dólares en sus cuentas y fondos.
Ya solo la fortuna de Elon Musk, que se encargará de codirigir el Departamento de Eficiencia Gubernamental (creado ex profeso para él) llega a los 500.000 millones de dólares, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg, que agrupa a las 500 personas más ricas del mundo. Musk trabajará en el llamado DOGE codo con codo con el empresario farmacéutico Vivek Ganapathy Ramaswamy, cuyo patrimonio neto es de 960 millones de euros, según las estimaciones de la revista Forbes.
Por su parte, la fortuna del propio Donald Trump, según el índice de Bloomberg, está estimada en los 6.700 millones de dólares. Así lo confirman tanto Bloomberg como Forbes. Este último medio de comunicación lleva un seguimiento exhaustivo de las finanzas del presidente. A pesar de todo, recalca que es complicado saber cuál es la fortuna exacta del magnate.
Dentro de su equipo se encuentran consejeros delegados de gigantes tecnológicos, directores financieros de Wall Street y hombres de negocios en el sentido más amplio. Puede afirmarse que Trump ha orquestado la Administración más rica de la historia de los Estados Unidos. Como era de esperar, esta tendencia se manifiesta con especial claridad en la elección del secretario del Tesoro. Scott Bessent no solo destaca por ser uno de los discípulos aventajados de George Soros, ya que dirigió las inversiones del principal fondo de inversión del propio Soros. Con esa lección bien aprendida, Bessent se lanzó a la creación de su propio vehículo inversor, un hedge fund identificado bajo el nombre de Key Square Group. El futuro ministro de Economía de Trump cuenta así con una fortuna que se estima en cerca de 3.500 millones.
Por su parte, la horquilla patrimonial del futuro secretario de Comercio, Howard Lutnick, está entre los 2.000 y los 3.000 millones de dólares, dependiendo la fuente que se consulte. En un principio su nombre sonaba para el Tesoro, pero finalmente acabó ostentando esta cartera, siempre y cuando el Senado acepte su perfil. Es el presidente de Cantor Fitzgerald, una firma de inversiones.
La subsecretaría de Defensa también estará bajo los mandos de otro multimillonario. En concreto, Donald Trump ha elegido a Stephen Feinberg como segundo de a bordo del Pentágono. Según el índice de multimillonarios de Bloomberg, Feinberg cuenta ahora en su cuenta bancaria y fondos de inversión con una fortuna que supera los 7.700 millones de dólares.Es el cofundador y propietario mayoritario de la firma de capital privado Cerberus Capital Management y también posee grandes inversiones en empresas relacionadas con la tecnología de defensa. En el caso de que el Senado ratifique su cargo, Feinberg trabajará codo con codo con el expresentador de Fox News y veterano de guerra, Pete Hegseth.
Por su parte, el futuro vicepresidente de los Estados Unidos y mano derecha de Donald Trump, J.D. Vence, actual senador por Ohio, tiene acumulado un patrimonio neto estimado en 4.800 millones de dólares, según declaraciones financieras federales presentadas en agosto de 2024.Su principal activo es una cuenta en Charles Schwab, valorada entre 2,3 y 7,7 millones de dólares. Además, posee inversiones en Bitcoin por un valor estimado entre 250.000 y 500.000 dólares, bienes raíces en Washington, valorados entre 500.000 y un millón de dólares, y una participación en su fondo de capital de riesgo, Narya Capital Fund, también estimada entre 500.000 y un millón de dólares.
También cabe señalar la presencia del llamado zar –en la nomenclatura de la Administración estadounidense– de la Energía y secretario del Interior, Doug Burgum. En 2023, Forbes estimó su patrimonio neto en aproximadamente 1.100 millones de dólares, situándolo entre los políticos más acaudalados de Estados Unidos. Las inversiones de Burgum están diversificadas en bienes raíces y capital de riesgo. Es fundador del Kilbourne Group, una firma de desarrollo inmobiliario enfocada en revitalizar el centro de Fargo, y cofundador de Arthur Ventures, una empresa de capital de riesgo especializada en software. El director ejecutivo de la organización Americans for Tax Fairness (Estadounidenses por una tributación justa), David Kass, aseveró que la Administración Trump será “un gobierno de multimillonarios para multimillonarios”.
Reiteró que su objetivo va a ser el de rebajar los impuestos para los más ricos, a costa de una subida de precios y disminución de servicios públicos esenciales a los más pobres, según critican los más decididos enemigos del nuevo Gabinete de Donald Trump.
Otro de los nombres que también resaltan en la Administración de Donald Trump es el de Linda McMahon, futura secretaria de Estado de Educación una vez sea validada por el Senado. Es la antigua directora operativa de la WWE, la empresa de espectáculos de lucha libre más grande de los Estados Unidos. Según la revista Forbes, McMahon tiene una fortuna compartida con su marido, Vice, que asciende a los 3.000 millones de dólares.
Fuente: Revista El Economista