La inteligencia artificial que permitirá grabar imágenes de nuestros sueños

Los avances tecnológicos permiten realizar tareas cada vez más complejas. Algunas, incluso, que no podemos llegar a imaginar. Desde elaborar un texto o diseñar una imagen en base a unos conceptos, hasta prácticamente cualquier cosa. Uno de los últimos objetivos es el de grabar nuestros sueños y pensamientos. Así se pondría fin a uno de los problemas más repetidos: soñamos algo, pero no logramos retenerlo en la memoria.

Según un estudio publicado por la Escuela de Posgrado de Biociencias de Vanguardia de la Universidad de Osaka, esta nueva inteligencia artificial (IA) será capaz de grabar imágenes en alta definición a partir de nuestros sueños. Dicho estudio es pionero en cuanto a proporcionar una interpretación cuantitativa del modelo de IA desde una perspectiva biológica.

Esta tecnología (Stable Diffusion, el motor de inteligencia artificial generativa más poderoso del momento) no ha tenido que ser entrenada para generar las imágenes, sino que ha aprendido por sí misma tras analizar las señales fMRI del córtex visual superior. Gracias a este novedoso estudio, los investigadores ven una forma de comprender mejor el funcionamiento de estos modelos, de los que todavía queda mucho por conocer.

Funcionamiento similar al cerebro

Los modelos de inteligencia artificial se comportan de forma parecida al cerebro humano, tal y como explican los investigadores del estudio. A mayor estímulo, mayor es la resolución de la imagen. Según avanza la eliminación de ‘ruido’, se produce una disociación funcional entre las capas de la red de la corteza visual. “En la primera de estas se representan detalles a escala final en las primeras áreas visuales, mientras que en la capa de cuello de botella está la información de orden superior”, añaden.

Esta tecnología empleada sigue los pasos de estudios previos. Uno de De ellos, realizado por la Universidad de Berkeley en 2021, si bien era más surrealista. En él, el sistema pudo capturar la actividad visual del cerebro humano y reconstruirla como videoclips digitales. De acuerdo con el profesor Jack Gallant, neurocientífico de Berkeley y coautor de la investigación, “este es un gran salto hacia la reconstrucción de imágenes internas. Estamos abriendo una ventana a las películas en nuestras mentes”.

La gran diferencia con el experimento previo es que en aquel sí que fue necesario un entrenamiento para la inteligencia artificial. Se emplearon tres sujetos diferentes, que tuvieron que estar dentro de un sistema funcional de imágenes por resonancia magnética durante horas. Entonces, fueron expuestos a dos grupos diferentes de tráileres de películas, mientras el sistema de fMRI registraba el flujo sanguíneo del cerebro.

Según iban avanzando las visualizaciones, la computadora aprendía cada vez más sobre cómo la actividad visual en pantalla correspondía a la actividad cerebral. Tras grabar la información obtenida se empleó otro grupo de clips para reconstruir los vídeos que se mostraban. Entonces el ordenador, tras analizar 18 millones de segundos de vídeo aleatorio, construyó una base de datos de actividad cerebral potencial para cada clip. El resultado, un vídeo de baja resolución y borroso, aunque coincidía con los clips reales vistos por los sujetos. Ahora, esta nueva tecnología mejora lo anterior, al ser más precisa y no necesitar un entrenamiento previo.

Fuente: Marca

ra

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