El caso de Lucas Paquetá y su presunta participación en apuestas deportivas ha tomado un giro drástico debido a hechos recientes. Los investigadores le habían confiscado el teléfono, pero tras recuperarlo, Paqueta lo tiró a la basura.
La FA de Inglaterra, que quería el dispositivo para realizar más investigaciones, ahora acusa al jugador de obstruir la investigación, por lo que pide una sanción de por vida para el volante brasileño.
Según el medio británico, Mail Sport, Paquetá ya había entregado ese celular a la justicia, y el mismo sido revisado durante dos meses. En ese tiempo, Paquetá compró un nuevo celular. Al recibir de vuelta el antiguo, lo botó. (D)