La Asamblea salió de vacaciones sin agotar el tratamiento de la proforma presupuestaria del 2023. La propuesta del Ejecutivo irá al Registro Oficial sin cambios.
La resolución sobre este tema constaba como cuarto punto en el orden del día de la sesión 832 del Pleno, que fue convocada para las 13:50 del pasado domingo, pero que no se pudo instalar por falta de quórum.
Ante la falta de pronunciamiento del Parlamento, según el artículo 295 de la Constitución, lo que corresponde es que entre en vigencia conforme a la propuesta presentada por el Ejecutivo en segunda instancia.
La presidenta de la Comisión de Régimen Económico, Mireya Pazmiño, adujo que, en la práctica, las observaciones de la Asamblea quedan en nada, pues ya en 2021 y 2022 Carondelet no las acogió, a pesar de que fueron ratificadas por el Pleno.
“Sabíamos que el Ejecutivo no iba a acoger las observaciones otra vez”, señaló la legisladora expulsada de la bancada de Pachakutik, para quien la respuesta del Ministerio de Finanzas al respecto fue indeterminada.
La mayoría parlamentaria pretendía que se revisaran los rubros asignados a educación superior, salud, seguridad hasta el valor estimado del precio del petróleo para la nuevo año (USD 65), entre otros siete requerimientos, algo que Finanzas se comprometió a analizar en el transcurso del 2023.
Maniobras políticas pesaron
Además de la proforma 2023 y la programación presupuestaria cuatrianual 2023-2026, no se pudo realizar el segundo y definitivo debate del proyecto de reformas a varios cuerpos legales en materia de seguridad ciudadana, algo que fue criticado por el oficialismo.
Pazmiño adujo que esta situación responde a que la mayoría legislativa de la que forma parte no estuvo de acuerdo con que para ese mismo día se convocara a la posesión de un nuevo Superintendente de Bancos, tras un fallo judicial.
Pazmiño recordó que el Parlamento ya posesionó a Raúl González en ese cargo meses atrás, quien no pudo ejercer por una acción judicial. De allí que no reconoce a Roberto Romero, designado por la mayoría del Consejo de Participación Ciudadana (Cpccs).
“Ya posesionamos a un Superintendente, no íbamos a permitir que ingrese ninguna moción, ningún pedido, de estar nuevamente posesionándole (…). Yo no estaba de acuerdo con las decisiones que tomó el Presidente de la Asamblea, que lo hizo de manera personal”, señaló.
El oficialismo, sin embargo, tachó de mentira que haya pretendido cambiar el orden del día de las sesiones para concretar la posesión del nuevo superintendente, pues este tipo de solicitudes deben ser ingresadas con 24 horas de anticipación, algo que no ocurrió.
Desde el 19 de diciembre la Asamblea se acogió a su último receso legislativo por 15 días. Las actividades se retomarán el 3 de enero. En este lapso se suspenden las sesiones del Pleno y las comisiones, así como el tratamiento de leyes y juicios políticos.
Fuente: El Comercio