El Bayern Munich estuvo a segundos de celebrar el título de la Bundesliga 2024/25 este sábado, pero un gol agónico de Yussuf Poulsen al minuto 95 le arrebató la victoria y postergó la fiesta bávara una semana más.
El equipo de Vincent Kompany ganaba 3-2 como visitante ante el Leipzig, resultado que le aseguraba el campeonato. Todo parecía definido: en la banca, Harry Kane —quien no jugó por suspensión— ya se preparaba para celebrar lo que habría sido el primer título de su carrera profesional.
El delantero inglés incluso bajó al campo desde la tribuna con una sonrisa de oreja a oreja, listo para sumarse a la celebración. Pero el fútbol tenía otros planes: en la última jugada del partido, Poulsen silenció a los visitantes con un cabezazo que igualó el marcador 3-3 y dejó a todos, incluyendo a Kane, en shock total. (D)