Hace mucho tiempo que un partido del Brasileirao interesaba tanto en España como el Paranaense vs Palmeiras de este domingo. El hecho de que Endrick, la gran perla brasileña por la que ha apostado el Real Madrid y Vitor Roque, el joven talento sobre el que el Barça quiere construir una nueva generación dispuesta a competir por todo se veían las caras en el Ligga Arena de Curitiba por la jornada 13 del torneo local.
Ambas estrellas empezaron como titulares un choque en el que Palmeiras presentaba algunas rotaciones tras la jornada de Libertadores de hace escasos días atrás, lo que convertía a Endrick en la gran referencia ofensiva ante la suplencia de figuras como Rony, y las ausencias de Artur y Raphael Veiga. Por su parte, Paranaense presentaba un once más similar al ‘equipo de gala’ que suele alinear Carvalho, con Vitor Bueno y el uruguayo Canobbio acompañando a Vitor Roque en el tridente de ataque.
El arranque fue de Palmeiras, y sobre todo de Endrick. El jugador de 16 años salió muy enchufado y a los 2 minutos de juego, en una disputa por un balón que estaba perdiendo por línea de fondo, el joven atacante de Palmeiras ganó la partida a Ze Ivaldo, que le propinó un codazo merecedor de pena máxima. Fue el propio Endrick, con personalidad y valentía, el que pidió lanzar el penalti. El joven talento eligió su lado derecho para ejecutar un lanzamiento raso que adivinó Leo Linck. De esta forma, Endrick desperdició un penal que el mismo había provocado.
Este error no iba a frenar el impetú de Endrick, y pasado el cuarto de hora de juego intentó sorprender con un lanzamiento de falta muy lejano que a punto estuvo de conseguir de objetivo. Nuevo intento de Palmeiras por medio de un Endrick decidido a ser diferencial ante el finalista de la pasada edición de Copa Libertadores.
Endrick siguió intentándolo, una y otra vez, hasta que en el minuto 22 de juego, remató de cabeza a bocajarro un balón servido por Breno Lopes. Esta vez, el jugador de 16 años no falló y puso por delante a Palmeiras en un choque dominado por los visitantes. En este arranque, el otro gran protagonista para los focos, Vitor Roque, poco pudo hacer, al no recibir balones a causa del sufrimiento de su equipo en línea de creación. Tan solo un balón lanzado desde el corner y peinado en el primer palo pudo hacer que el jugador de Paranaense entrase en la crónica de este primer tiempo, lamentablemente para los de Curitiba, el balón se paseó con demasiada altura ante el intento imposible de un Vitor Roque con poco peso en el juego.
El final del primer tiempo volvió a poner a Endrick en boca de todo el mundo. En la frontera del añadido y el tiempo reglamentario, el jugador nacido en Taguatinga estrelló en el palo un buen remate al primer toque a raíz de un centro algo pasado que cazó a la perfección pero sin ángulo suficiente para evitar encontrarse con el exterior de la madera.
El segundo periodo arrancó de forma similar a lo que nos habían deparado los primeros 45 minutos. Endrick por otra parte, empezó a notar cierto bajón físico a causa de la intensidad mostrada en la primera parte. Aún así alcanzó a lanzar un buen desmarque en el minuto 57, ayudando a generar espacio a Gabriel Menino, que tras un recorte y lanzó un disparo de diestra que rebotó en un rival, despistando al portero y haciendo así el segundo de Palmeiras.
Todo se iba a torcer para los visitantes apenas 8 minutos después. Garcia, con una posición antinatural, interfería en un disparo de un rival con su brazo, y tras una breve revisión, el colegiado Gonçalves Lima señalaba como pena máxima clara y segunda amarilla para el defensor de Palmeiras, una oportunidad de oro para que Paranaense descontase en el marcador y jugar un buen tramo de partido en superioridad. Vitor Bueno fue el encargado de ejecutar el penal, y con mucha tranquilidad hizo el 1-2 y los locales tenían algo menos de media hora para ir a por el empate.
Inmediatamente tras recibir el tanto, Abel Ferreira quiso reforzar su sistema defensivo y reconstruir el esquema tras la expulsión y sustituyó a Endrick, que se marchaba con cara de satisfacción personal y su equipo aún ganando. Si la joven promesa adquirida por el Real Madrid había brillado, la del Barça iba a intentar no ser menos. Vitor Roque, animado por la chance de igualar que se había presentado, subió una marcha y tras unos minutos de asedio por parte de los suyos, hizo gala de su capacidad de anticiparse a las jugadas y tras un buen movimiento cazó una buena dejada de cabeza de Madson para rematar a placer y empatar la contienda.
Con algo más de un cuarto de hora por delante, y ya sin Endrick y con un jugador menos, Palmeiras empezó a contentarse con dicho empate. Los de Ferreira empezaron a bajarle las pulsaciones al choque, mientras que Paranaense no veía la forma de romper el nuevo entramado visitante. En la última del partido, una buena falta a unos 30 metros de la meta de Paranaense, los visitantes optaron por realizar una jugada que quedó en nada, desaprovechando así la chance más clara del descuento y cerrando el choque con un reparto de puntos que deja a Palmeiras en cuarta posición y a Paranaense noveno del Brasileirao. (D)