Luego de generar un revuelo absoluto en Brasil por su llegada al Corinthians, y de tener un rendimiento acorde a lo que se esperaba en sus primeros seis meses, Memphis Depay vuelve a estar en el centro de escena. Pero ésta vez no por algo deportivo ni positivo, sino todo lo contrario.
El delantero neerlandés de 30 años y que supo jugar en Barcelona -era post Messi- y Atlético de Madrid, fue condenado a cuatro meses de prisión en Mónaco por ser encontrado en estado de ebriedad mientras conducía un Rolls-Royce por el principado.
Según explica RMC Sport, el nivel de alcohol que acusaba Depay en el momento de su detención por parte de la policía del Principado de Mónaco era de 1,01 mg por litro de aire. Es decir, más de 2g de alcohol por litro de sangre.
Depay no tendrá que ir a prisión y seguirá jugando en Corinthians
El incidente, que ocurrió el pasado 6 de agosto de 2024, recibió una sentencia por parte de los tribunales ordinarios de Mónaco, le costará 9000 euros al futbolista, y dos años de prohibición de conducción en el principado. La condena también incluye cuatro meses de prisión, los cuales no deberá cumplir. Esto en base al principio de “prisión suspendida“, a la cual podrá optar mientras no incumpla ciertos requisitos.
Depay, que expresó su arrepentimiento por lo sucedido, no estuvo presente en la sentencia del caso, y aunque su entorno podría pedir una apelación del dictamen, desde Francia entienden que eso no sucederá. Y es que la pena recibida, a pesar de quedar registrada en su prontuario, no reviste una gravedad sustancial para su presente ni futuro.
El futbolista sigue formando parte del plantel de Corinthians, tal y como lo ha hecho a lo largo de todo el proceso judicial en Mónaco. Desde su llegada, el neerlandés acumula quince partidos con la camiseta del Timao y siete goles convertidos, aunque todavía no sumó tantos en lo que va del 2025. (D)