LIMA.- La fiscal general de Perú inició 11 investigaciones para identificar a los responsables de más de tres docenas de muertes, en su mayoría civiles, durante algunas de las protestas sociales más violentas del país en años, dijo su oficina el viernes.
La controvertida destitución del expresidente izquierdista Pedro Castillo el mes pasado desencadenó los disturbios, que se han cobrado la vida de al menos 41 civiles y un policía.
La fiscalía general de Perú, Patricia Benavides, anunció que las investigaciones se centraron en los violentos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad en las sureñas regiones de gran población indígena de Puno, Cusco, Arequipa, Apurímac y Ucayali, así como en la capital del país, Lima.
Esta semana, Benavidez abrió una investigación preliminar de “genocidio“ contra la presidenta Dina Boluarte y varios ministros.
Boluarte, el exvicepresidente de Castillo, asumió el cargo después de que los legisladores destituyeran a su asediado predecesor después de que intentara disolver el Congreso y gobernar por decreto el 7 de diciembre.
La oficina de Benavidez dijo que 355 civiles y 176 policías resultaron heridos, con otros 329 ciudadanos arrestados, todos vinculados a las protestas callejeras antigubernamentales desde la destitución de Castillo.
Grupos de derechos humanos acusan a policías y soldados de usar fuerza excesiva, incluyendo munición real y lanzar gases lacrimógenos desde helicópteros, mientras que las fuerzas de seguridad dicen que los manifestantes, principalmente en los Andes del sur de Perú, han usado armas caseras y explosivos contra ellos.
Muchas de las protestas enojadas y, a veces, violentas se han desarrollado en regiones mineras clave del sur , pero el jueves miles marcharon por las calles de Lima exigiendo el cierre del Congreso y la renuncia de Boluarte.
Fuente: reuters.com