El Real Madrid dejó en las manos del Barcelona la última chance que tenía para salvar la temporada (más allá de que es cierto que ya había ganado la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental). En el Estadio La Cartuja de Sevilla, en el tiempo suplementario, el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti perdió 3 a 2 el duelo decisivo de la Copa del Rey y, de esa manera, hilvanó la segunda final perdida de manera consecutiva con su clásico rival (la anterior fue a principio de año en la Supercopa de España).
Este resultado se le adjunta al que sufrió hace semanas ante el Arsenal por los Cuartos de Final de la UEFA Champions League. Fue un marcador contundente de 5 a 1 en el global y despedida de manera temprana, por lo menos, a lo que está acostumbrada la Casa Blanca, por lo que tras la derrota con el Culé, inmediatamente, empezó el reparto de culpas entre hinchas y protagonistas, con un episodio en particular que incluye hasta el manager de uno de los jugadores.
El foco de las críticas de los aficionados, en lo que a redes sociales corresponde, estuvo, principalmente, en Thibaut Courtois, Rodrygo Goes, Vinícius Júnior y Brahim Díaz. Por este último, debió interceder su representante, debido a un comentario de una de las cuentas de X (ex Twitter) que más simpatizantes del Real Madrid recluta.
”Me acaba de abrir la agencia/agente de Brahim pidiéndome explicaciones por lo que he subido de él, que me coman los huevos. Se ha cargado la final junto a Courtois. Yo no me caso con nadie. Tengo para todos”, advirtió ante sus seguidores el usuario Castillo__Rm.
En esa misma línea, Gam, otra reconocida cuenta del club merengue, pidió abiertamente que ”homenaje y adiós” para Carlo Ancelotti, Luka Modric, ”gracias y adiós” para Lucas Vázquez y el cierre de ciclo para Rodrygo, Brahim Díaz, Ferland Mendy, Fran García, David Alaba y Jesús Vallejo.
Incluso, aunque suena increíble, también hubo para Florentino Pérez. ”Estará contento Florentino, ¿no? Él dijo que quería un Barça fuerte. Felicidades, presi”, lanzó TrunksRM delante de sus más de 200 mil adeptos. Por estas horas queda en evidencia que en la institución de la capital española no se salva nadie.
