El Inter y el Milan llegaban al césped delGuiseppe Meazza con una clara igualdad en los primeros partidos de la Serie A, compartiendo el liderazgo en la tabla tras haber conseguido llevarse la victoria en las tres jornadas anteriores. Pero la igualdad con la que partían no ha sido visible en el ‘Derby della Madonnina’ de hoy, pues el Inter ha sido muy superior con un claro dominio sobre su rival.
El Inter salía al campo con la fuerza necesaria para llevarse el encuentro marcado en el calendario de la liga italiana. A los cinco minutos ya había abierto el marcador gracias al centro de Thuram, apareciendo Mkhitaryan dentro del área pequeña y haciendo las delicias de los seguidores con un zurdazo que subía el primer tanto para los de Inzaghi.
Thuram fue el nombre propio de la primera parte. Todos los balones que llegaban al área encontraban su figura para recibirlos, hasta que en el minuto 38 se ha coronado con un golazo. Si bien el Milan estaba encontrando más huecos y generando alguna ocasión de peligro, muy escasas en la primera parte, Marcus llegó para rematar el contraataque. Desde la esquina del área conseguía poner el balón en la escuadra con un disparo con la derecha.
El Milan fue al descanso sabiendo que debían reaccionar y lo hicieron. A pesar de que parecía que no iban a ser capaces de hacerle daño al Inter, pues habían salido con poco acierto de nuevo en la segunda mitad, cambiaron su mentalidad. El Inter estaba muy bien asentado en el partido, pero una rápida reacción de Giroud, con un pase espectacular desde fuera del área, hizo que Leao subiese el primero recortando distancias provocando cierto bajón en el Inter.
Ese bajón duró escasos minutos. Si el Milan pensaba que podía entrar de nuevo en el partido y tener opciones de remontar,Mkhitaryan rompía esas ilusiones en apenas 12 minutos. El centrocampista subía el tercer tanto al marcador con un muy buen gol desde dentro del área tras un pase de Lautaro Martínez que controló el esférico a la perfección. El doblete del jugador armenio caía como un jarro de agua fría en los de Pioli.