Los Pitufos mantiene la cima dentro del torneo local, pero todavía no hay nada dicho con mucho por recorrer de camino aún. Si bien la ventaja es holgada, cada tropiezo sirve para que los demás se froten las manos en su intento por darles caza.
Resultado que no estaba entre los planes del KRC Genk, pero que tampoco debe dejarles del todo inconformes. El desafío de este fin de semana les ha planteado un desafío ante el STVV con quienes han debido igualar a dos tantos por lado (2×2).
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Angelo Preciado ha tenido un ingreso demasiado tardío donde ya parecía que todo estaba sentenciado y que solo alguna acción aislada podría desencadenar en otro tanto. Esto ha hecho que el ecuatoriano poco o nada pueda hacer. (D)