El FMI prevé una “sacudida sin precedentes” en el mercado laboral con la Inteligencia Artificial

Difícil mensaje de digerir del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la Inteligencia Artificial (IA). El FMI cree que la IA va a revolucionar los mercados laborales. Además, lo va a hacer de una forma que no se había sospechado, puesto que muchos puestos de trabajo que parecían no peligrar -puestos que requieren alta cualificación- podrían cambiar radicalmente con la llegada de este tipo de inteligencia que tiene su máxima expresión en plataformas como ChatGPT o Midjourney.

 

La introducción de la Inteligencia Artificial puede suponer una “sacudida sin precedentes” en los mercados laborales, según ha advertido la primera subdirectora general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, para quien no existen garantías de que finalmente los beneficios superen a los costes y ha reclamado un conjunto de reglas “verdaderamente global”.

Si se analiza la historia, se puede concluir que hasta la fecha la tecnología no crea desempleo. Es más, los países más intensivos en tecnología y capital (maquinaría…) suelen ser los que menos desempleo presentan. Además, atendiendo a los datos de paro a largo plazo, utilizando la media de los países del G7 se puede ver que la tecnología ha mejorado la productividad sin afectar al empleo en términos agregados. “Estos datos revelan, claramente, que el desempleo ha oscilado en función de los ciclos económicos, en lugar de cualquier ola tecnológica”, según explicaban hace unos días los economistas de Deutsche Bank. Pero esta vez podría ser diferente.

Mayor productividad…

En un discurso pronunciado en Glasgow con motivo del tercer centenario del nacimiento de Adam Smith, la mano derecha de Kristalina Georgieva en el FMI indicó que la IA podría contribuir a revertir la ralentización en el crecimiento de la productividad mundial mediante la automatización de ciertas tareas cognitivas al tiempo que da lugar a nuevas funciones de mayor productividad para que las realicen los humanos. Pero esto podría tener un coste importante en términos de empleo.

… A costa de menos trabajo

Sin embargo, aparte de las potenciales ganancias en productividad, Gopinath destacó que la IA podría “sacudir el mercado laboral de formas sin precedentes”, advirtiendo de que tras la reciente pérdida de trabajos de cualificación media por la automatización, la IA podría afectar a las ocupaciones y las industrias de manera diferente a oleadas anteriores de automatización.

En este sentido, recordó que estudios empíricos recientes sugieren que la IA puede reducir la polarización del mercado laboral al ejercer presión a la baja sobre los salarios de los trabajos mejor remunerados, además de aplanar la estructura jerárquica de las empresas, aumentando el número de trabajadores en puestos junior y disminuyendo el número en puestos de mando intermedio y alto.

“El número de puestos de trabajo afectados podría ser arrollador”, afirmó la alta funcionaria del FMI, para quien no puede garantizarse que las ganancias de los ganadores sean suficientes para compensar a los perdedores.

Reemplazará muchos trabajos

“Es muy posible que la IA simplemente reemplace los trabajos humanos sin ningún esfuerzo para crear nuevos trabajos más productivos para que los humanos se muden”, por lo que, a pesar del potencial de la IA, instó a considerar el amplio efecto negativo que podría tener sobre el empleo y la agitación social que esto podría causar. Esta es una visión más pesimista que la de algunas instituciones financieras como Deutsche Bank (DB), que prevén un futuro positivo para el empleo en su convivencia con la IA.

No obstante, los economistas de DB también mostraban su miedo a que esta vez fuera diferente, dado el inmenso potencial que tiene la IA y la amplia gama de empleos que pueden verse afectados.

De este modo, en referencia a Adam Smith, la economista del FMI ha defendido que ‘la mano invisible’ por sí sola puede no ser suficiente para asegurar amplios beneficios para la sociedad por la introducción de la IA por lo que considera necesario y urgente establecer regulaciones sólidas e inteligentes que aseguren que esta innovación se aproveche en beneficio de la sociedad.

“Cuando se trata de IA, necesitamos más que reglas nuevas. Necesitamos reconocer que esto podría ser un juego completamente nuevo, y que requerirá un enfoque completamente nuevo de la política pública”, señaló, añadiendo que la propuesta planteada por la UE es un comienzo alentador.

En este sentido, consideró “alentador” que el G7 haya formado un grupo de trabajo para estudiar la IA. “Necesitamos un conjunto de reglas verdaderamente global”, defendió Gopinath, subrayando que, teniendo en cuenta lo rápido que avanza la tecnología, el tiempo es esencial.

Fuente: Revista El Economista 

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