El Manchester City no aflojó antes de medirse al Real Madrid en la Champions. El conjunto inglés encarará la eliminatoria contra los blancos de la mejor manera; líderes de la Premier y con un fútbol sólido y eléctrico, con Haaland metiendo miedo y con De Bruyne completamente recuperado de sus molestias físicas. La duda surge con Aké, que tuvo que dejar el campo por un pinchazo en el gemelo.
Los tres puntos se quedaron en Manchester en una tarde que acabó con más nervios de los esperados. El Leeds fue una marioneta a manos del City y de Ilkay Gündogan, autor de un doblete, pero el error de Akanji en el tramo final -marcó Rodrigo Moreno- animó al nuevo equipo de Sam Allardyce e inquietó a los de Guardiola, que pese a sufrir en el descuento acabaron afianzando su liderato.
Y eso que todo parecía ir sobre ruedas tras un primer tiempo de gran intensidad por parte del City. La eliminatoria contra el Madrid pareció condicionar la elección del ‘once’ de Guardiola, que dio descanso a titulares como Rodri, Rúben Dias o Bernardo Silva, aunque no a Haaland ni a Kevin De Bruyne, recuperado de sus molestias físicas. Ambos jugaron los 90 minutos y volvieron a demostrar su química sobre el terreno de juego, aunque fue la conexión entre Mahrez yGündogan la que dio más rédito a los ‘citizens’.
Fuente: Mundo Deportivo