El empresario de 57 años, Eduardo Maruri, se suma a la lista de precandidatos que buscan la presidencia de la República que actualmente está en manos de Guillermo Lasso. El guayaquileño iría cobijado por la estructura política de Centro Democrático, movimiento de centro izquierda que tiene como director nacional al comunicador social Jimmy Jairala.
La candidatura de Maruri se oficiaslizaría en unos días, pero mientras tanto su nombre entraría en la lista de precandidatos en la que hasta el momento están Yaku Pérez, quien va por la alianza Unidad Popular, Democracia Sí y Somos Agua; Daniel Noboa, que contaría con el apoyo del movimiento Igualdad, Pueblo y Democracia; Jan Topic, respaldado por el Partido Social Cristiano (PSC): Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) quien representaría al movimiento Pachakutik; Fernando Villavicencio, respaldado por el movimiento Construye; y Otto Sonenholzner, apoyado por el partido político Avanza.
Eduardo Maruri Miranda es economista nacido en 1966 y fue vicepresidente del partido político Una Nueva Opción, agrupación con la que en 2007 fue elegido para integrar la Asamblea Nacional Constituyente por la provincia del Guayas. Ha sido presidente del club de fútbol Barcelona de Guayaquil y es presidente y fundador de la agencia de publicidad Maruri Gray Ecuador.
En 2004 también fue presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil y en 2006 fue elegido como el presidente de la Federación Nacional de Cámaras de Comercio del Ecuador.
En las elecciones generales de 2023 que se realizarán el próximo 20 de agosto se escogerán presidente y vicepresidente de la República y a los 137 asambleístas que ocuparán cargos hasta mayo de 2025.
El calendario de elecciones 2023 aprobado por el CNE prevé que entre el 25 de mayo y el 7 de junio próximos se realicen las primarias a la interna de las organizaciones políticas y del 28 de mayo al 10 de junio se de la inscripción de candidaturas. Una vez se cumplan estos plazos se dará la fase contenciosa del proceso, es decir, se abre la posibilidad de que existan apelaciones e impugnaciones.
Al final de esta etapa se conocerán cuántos candidatos quedan para las diferentes dignidades.
Fuente: El Universo