Alemania conmemora 35 años de la caída del Muro de Berlín con festividades a partir de este sábado bajo el lema “preservemos la libertad”, mientras continúa la invasión rusa de Ucrania y muchos temen que la democracia esté bajo ataque.
El canciller Olaf Scholz, cuya coalición colapsó dramáticamente esta semana, dijo en un mensaje a la nación que los ideales liberales de 1989 “no son algo que podamos dar por sentado”.
“Una mirada a nuestra historia y al mundo que nos rodea lo demuestra”, sostuvo.
El 9 de noviembre de 1989 se celebra como el día en que la dictadura de Alemania del Este -o República Democrática Alemana (RDA)- abrió las fronteras a Occidente después de meses de protestas masivas pacíficas, lo que allanó el camino para la reunificación alemana y el colapso del comunismo soviético.
Este sábado, el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier inaugurará los actos en el Memorial del Muro de Berlín, que honra a las al menos 140 personas que murieron intentando huir de la RDA, apoyada por Rusia durante la Guerra Fría.
En la noche, se celebrará una “fiesta de la libertad” con un espectáculo de música y luces en la emblemática Puerta de Brandeburgo, en el antiguo camino de la barrera de concreto que dividió la ciudad en dos desde 1961.
El domingo, la banda punk rusa de protesta Pussy Riot actuará frente a la antigua sede de la Stasi, la temida policía secreta de la antigua Alemania del Este.
Activistas prodemocracia de todo el mundo fueron invitados a las conmemoraciones, entre ellos la líder de la oposición bielorrusa Svetlana Tikhanovskaya y la disidente iraní Masih Alinejad.
También habrá charlas, actuaciones y una gran exposición de arte al aire libre que marcarán lo que la ministra de Cultura, Claudia Roth, llamó “uno de los momentos más alegres de la historia mundial”.
Fuente: dw.com