Alejandra Guzmán ha compartido recientemente su primera entrevista en televisión tras el fallecimiento de su madre, la icónica actriz doña Silvia Pinal, a los 94 años. En una conversación cargada de emociones en Univisión, la cantante se abrió para recordar a la diva del cine mexicano y reflexionar sobre el impacto que su partida ha tenido en su vida y volver a hablar con su hija Frida Sofía.
La rockera habló sobre los momentos difíciles que vivió en los últimos días de su madre. Este período no solo marcó el ciclo de despedida, sino que también fue una oportunidad para que pudiera restablecer el vínculo con su hija, Frida Sofía. Sin embargo, la nieta de Pinal no pudo despedirse de su abuela en un acto que, según Guzmán, fue un cierre vital en su proceso de duelo.
“Lo más fuerte fue localizar a Frida. Sí (yo le hablé), porque es su derecho y yo sé que ella la amaba con todo su corazón, entonces fue muy fuerte. Nada más ella pudo lograr esa llamada, esa cercanía, ese momento que nunca voy a olvidar”, dijo en exclusiva a Despierta América.
La emotividad de Guzmán fue palpable mientras describía el gran amor que siente por su hija y cómo esa conexión es fundamental en momentos de dolor. Para ella, la despedida a doña Silvia se convirtió no solo en un adiós a una madre, sino también en un paso hacia la reconciliación familiar. Esta experiencia ha dejado una huella profunda en el corazón de Alejandra, quien queda marcada por la fragilidad de la vida y la importancia de los lazos entre parientes.
“En ese momento se olvidan las cosas que puedan ser, lo que sea, ahí no importa qué haya pasado. Realmente lo que importa es el amor y el amor por la vida y el amor por tu sangre y esa conexión que jamás va a dejar de estar porque es un cordón umbilical”, agregó la cantante.
Con su capacidad para transformar el dolor en música y en arte, Guzmán demuestra que, a pesar de las adversidades, el amor siempre encuentra la manera de prevalecer. Su historia no solo refleja su valentía como artista, sino también su humanidad en medio de la pérdida y el anhelo por reconstruir relaciones entrañables.
Fuente: eldiariony.com
