La escuela Carlos Calderón Chico, en la Isla Trinitaria, se convirtió en la primera de las 30 escuelas fiscales (20 en la zona urbana y 10 en el área rural que están en proceso de contratación) que son intervenidas por el
Municipio de Guayaquil. La alcaldesa Cynthia Viteri entregó la obra para beneficio de 954 alumnos.
“Se están dejando mochilas inteligentes e implementos deportivos. El objetivo es que los niños sigan en las aulas en mejores condiciones. Cuenten siempre con una Alcaldía que se dedica a la gente”, destacó la burgomaestre.
La remodelación de la escuela fue una obra integral. La Dirección de Obras Públicas, junto a Interagua y EMAPAG, mejoró el entorno del plantel. La empresa municipal de Desarrollo, Acción Social y Educación (DASE) entregó
15 laptops, una pantalla digital y 630 mochilas inteligentes para los estudiantes. Mientras que la Dirección de Deportes donó 10 balones de fútbol e implementos deportivos. La Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) señalizó las vías circundantes.
“En total son 30 escuelas fiscales que se intervendrán sin tener recursos porque se toma de otras direcciones. ¿Qué obra funciona si sus hijos no tienen dónde estudiar?”, señaló Viteri.
La inversión en la escuela Carlos Calderón Chico fue de USD 225.767 y se generaron 50 plazas de trabajo. Pero la readecuación de las 30 escuelas demandará USD 6’250.000 y beneficiará a 25.000 estudiantes.
“La escuela queda expedita y el Municipio está entregando la obra 24 días antes de los estipulado en el contrato”, remarcó David Nurnberg, director de Infraestructura Comunitaria (DIC). Los trabajos incluyeron implementación de una estructura metálica tipo galpón con cubierta, reparación de la cancha,
pintura en aulas, rejas, puertas y ventanas, reparación de cerámicas, colocación de tumbado en los baños, mantenimiento al sistema eléctrico, reparación de luminarias, remodelación de baterías sanitarias, limpieza de
cisternas, tuberías, alcantarillado, pozos sépticos, rehabilitación del sistema hidrosanitario, entre otros.
La alcaldesa advirtió que mientras duren los trabajos en el resto de escuelas intervenidas por el Municipio no pueden recibir alumnos porque es peligroso para ellos. “Si abren serán cerradas por el Municipio, no puede haber clases mientras hay trabajadores y cosas que puedan atentar contra su seguridad”, indicó.