Ahorro al cambiar de gasolina es de $ 15 y $ 17 en cada tanqueada del vehículo

La nueva gasolina ecoplús 89 ya había salido al mercado en los días que a Sofía Orellana le tocaba recargar su vehículo con combustible, pero en el sector del norte de Guayaquil donde vive y trabaja no encontró una gasolinera que la comercializara, así que le siguió poniendo súper. El 28 de agosto pagó $ 64,93 por un poco más de doce galones que le duraron catorce días, y este domingo le tocó tanquear de nuevo.

Casi alcanza al nuevo precio de la ecoplús 89 que desde este 12 de septiembre bajó a $ 3,67, pero el indicador de combustible de su carro ya estaba muy abajo, así que no esperó un día y pagó $ 3,99 por los 12,3 galones que llenaron su tanque y en total le facturaron $ 49,14.

Su ahorro con este cambio de combustibles es de $ 15. Si lo hubiera hecho este lunes que el galón de la nueva gasolina bajó en 22 centavos, hubiera gastado hasta $ 19 menos, dependiendo del valor vigente en las gasolineras que forman parte del plan piloto para la venta de este nuevo combustible que se aplica en Guayas, Los Ríos y Esmeraldas.

El precio sugerido es de $ 3,67 para el periodo comprendido entre el 12 de septiembre y el 11 de octubre de 2022. El mes pasado el valor de referencia anunciado por Petroecuador fue de $ 3,89 y en las estaciones de servicio los precios oscilaron entre $ 3,86 y $ 3,99, ahora en algunas se vende a $ 3,70.

La gasolina súper también bajó desde este lunes. El galón que estaba en $ 5,13 ahora se expende en $ 4,68 como precio sugerido, aunque en algunas gasolineras se comercializa entre $ 4,50 y $ 4,70.

Hace un mes esa gasolina ya se había reducido en siete centavos. Las reducciones en el precio de esta gasolina de 92 octanos no frena la migración de los consumidores.

Así como Sofía se pasó de la súper a la ecoplús 89, Julio también ya optó por dejar la súper por la extra y el jueves pasado hizo el cambio y el primer efecto fue el de su bolsillo: los $ 35 y $ 37 que gastaba en cada tanqueada ahora se reducen a $ 20. Él ve un ahorro a largo plazo, pues cada recarga de combustible le dura diez días y en un mes piensa ahorrarse alrededor de $ 50.

El cambio de Sofía es una prueba para ver cómo le va, pues su vehículo es nuevo y no quiere que se le dañe. En cambio Julio ya se quedará de largo con la extra porque cuesta la mitad que la súper y su carro es del año 2006, comenta que aguantó pagando una súper costosa porque conducía poco durante la pandemia, pero ahora que sus hijos ya están en clases presenciales y tienen actividades extracurriculares el gasto de combustible se ha disparado en su hogar.

Precisamente por el encarecimiento del precio de los combustibles que afecta al mundo, en Ecuador se introdujo una gasolina intermedia: la ecoplús 89.

Petroecuador destaca su consumo al indicar que el ingreso al mercado de este biocombustible impulsa la producción local y genera dentro de su cadena de producción más de 200.000 empleos en la industria de azúcar y etanol del país: la cadena productiva de la caña de azúcar beneficia a más de 3.000 cañicultores independientes, con 5,5 millones de toneladas de caña de azúcar molidas por los ingenios. La utilización de los biocombustibles permite que la industria alcoholera realice la compra de alcohol artesanal a pequeños productores artesanales, lo que beneficia a alrededor de 3.900 familias en extrema pobreza, que pasan a ser formalizadas en la economía ecuatoriana, según datos de la Asociación de Biocombustibles del Ecuador (Apale).

Además de beneficios ambientales, evitar las importaciones de naftas de alto octano (NAO) y el ahorro de divisas. La nueva gasolina tiene mayor octanaje, ya que su mezcla contiene 8 % de etanol, componente 100 % natural con cero azufres y no contaminante. El etanol es el combustible más económico, eficiente y sustentable por su alto octanaje y sus bondades ambientales, 47 % más económico que las NAO, indica la estatal petrolera. (I)

Fuente: El Universo

Compartir esta noticia

Facebook
Twitter
Scroll al inicio