El Ing. Fernando Cornejo, presidente de Segura EP, manifestó en CONTRAPUNTO que les sorprendió que a media noche les llegara una resolución mediante correo electrónico, diciendo que el Gobierno se iba a hacer cargo del ECU911.
Son dos puntos, uno es la videovigilancia y el otro es la atención de llamadas del número único de emergencias (911). Hasta el 26 de septiembre fuimos los responsables ante los guayaquileños de manejar y coordinar todas las emergencias, lo hicimos con mucha responsabilidad y coordinación. Manejamos 2’179.000 emergencias con estándares internacionales y tecnología de punta. A media noche nos llegó una resolución mediante correo electrónico que nos sorprendió, diciendo que el Gobierno se iba a hacer cargo del ECU911.
El centro zonal ECU 911 Samborondón pasó de atender una media de entre 2.500 y 3.500 llamadas diarias de emergencia (hasta el 26 de septiembre de 2024) a procesar la atención de incluso más de 9.000 llamados de alerta al día, en la siguiente semana.
La entidad retomó la gestión de la central de emergencias ECU-911 Guayaquil y retiró el apoyo municipal que brindaba la empresa pública Segura EP, lo que ha desbordado la atención de alertas, según datos del centro zonal ubicado en la vecina parroquia La Puntilla (Samborondón).
Los tiempos de respuesta en los estándares internacionales te dicen que 119 segundos demora dar la respuesta adecuada a una llamada de emergencia, nosotros eso lo hacíamos en 115 segundos y en las dos últimas semanas habíamos mejorado los tiempos en 111 segundos. Lamentablemente, en la actualidad el tiempo en el que los guayaquileños reciben una respuesta es en 152 y 181 segundos. La Policía Nacional llegaba en 25 o 30 minutos, ahora se demora más de una hora en llegar. Las ambulancias llegaban en 5 minutos y ahora llegan en más de 20 minutos.
El sistema de atención de emergencias de la ciudad y de la provincia enfrentan una crisis, según denuncian operadores del centro, pues las emergencias procesadas se han incrementado hasta en 230% en medio de una pugna por el tema entre el Gobierno Nacional y el Municipio de Guayaquil. Los reportes apuntan a deficiencias operativas e incluso a negligencia institucional, que habrían llevado al límite la gestión de emergencias en la ciudad, con un aumento en los tiempos de respuesta y “una carga excesiva sobre el personal”.
El Decreto Ejecutivo 214 condujo desde el pasado 26 de septiembre al retiro del Municipio (y de su empresa de Seguridad, Segura EP) de la gestión del ECU-911 Guayaquil, lo que ocasionó desde el mismo día problemas con la atención de las llamadas. En tanto que, según los datos del portal estadístico del ECU-911, la central de Guayaquil -absorbida por el centro de Samborondón- pasó de procesar de 3.500 a 4.500 llamadas diarias a atender menos de 500, tras la salida del municipio de la gestión del sistema.
No obstante, entre las dos centrales -ahora son coordinadas por de la Zonal 5 y 8 del Ecu 911- se registra un incremento de unas 2.000 llamadas diarias en una de las ciudades con mayores problemas de inseguridad de Ecuador (más de 16.000 robos y casi 1.300 muertes violentas en lo que va del año).
Nosotros tenemos un convenio de patrullaje con el Ministerio del Interior, lo respetamos y lo cumplimos. Hemos incrementado el número de vehículos de 73 a 111 camionetas, vamos a invertir en nuevas camionetas para el 2025, estamos por recibir 50 motocicletas, hemos aumentado nuestro número de Agentes de Control Municipal a 1.398 y les hemos cambiado la visión, ahora ellos se dedican a controlar el espacio público, apoyo a la seguridad ciudadana, cuidado del ambiente e incentivo del turismo, hay un grupo canino, de apoyo comunitario y gestión de riesgos y desastres.
Finalmente, Cornejo detalló que de 700 postulantes seleccionados, 661 hombres y mujeres lograron aprobar el programa de capacitación como agentes de tránsito para graduarse y sumarse de forma oficial a las calles de Guayaquil. (I)