La parada militar del Día de la Fiesta Nacional, que presiden los reyes Felipe VI y Letizia, ha comenzado este sábado pasadas las 11:00 horas en la Plaza de Neptuno de Madrid, donde está instalada la tribuna real y la de autoridades, en un acto deslucido por la lluvia, que ha obligado a suspender el desfile aéreo.
Este no ha podido celebrarse finalmente debido a las fuertes lluvias que están cayendo sobre la capital de España, y tampoco ha podido participar la Patrulla Águila ni ha tenido lugar el tradicional salto de la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire y del Espacio (PAPEA). Tampoco participan este año los tanques Leopardo y Pizarro del Ejército de Tierra debido a las condiciones del asfalto.
Los reyes han llegado poco antes de las 11:00 horas, acompañados de la Princesa de Asturias, vestida con el uniforme de guardiamarina de la Escuela Naval. Han sido recibidos con honores militares y Felipe VI ha pasado revista al Batallón de Honores de la Guardia Real. Posteriormente, han saludado a las autoridades presentes, encabezadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la ministra de Defensa, Margarita Robles, el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante Teodoro López Calderón.
Como destaca la prensa conservadora, a la llegada a la Plaza de Neptuno, Sánchez ha sido objeto de pitadas, abucheos y gritos de “fuera, fuera” por parte de algunos de los ciudadanos apostados en los alrededores a una distancia de más de cien metros, mientras se escuchaban también vivas a Felipe VI. Sánchez había destacado en la red social X que “España es e mejor país del mundo”, en un tuit acompañado de un vídeo propagandístico.
Tampoco han faltado las voces críticas, como la del secretario general del partido independentista calatán JxCat, Jordi Turull, quien ha afirmado en la misma red social que el 12 de octubre no hay “nada a celebrar y mucho a reivindicar y a denunciar de una ‘Hispanidad’ que se ha abierto camino y se ha mantenido en tantos lugares a golpe de genocidio, imposición y/o represión”.
Fuente: dw.com