La economía gallega moderó su ritmo de crecimiento al incrementarse en un 0,5% en el tercer trimestre de este año, en comparación con los meses de abril a junio, mientras que el PIB de la comunidad aumentó un 2,5% en los últimos 12 meses, según el ‘Informe de Coxuntura Socioeconómica del Foro Económico de Galicia’.

Esto supone que la economía gallega creció en el tercer trimestre tres décimas por debajo de lo estimado en el conjunto de España y seis décimas menos que la media española en términos interanuales. El documento destaca que la demanda externa es el principal motor de crecimiento de la economía gallega.

En concreto, este parámetro aporta 2,4 puntos al crecimiento agregado del PIB, lo que contrasta con lo que ocurre en España, donde la demanda externa aporta solo siete décimas y la interna 2,4 puntos.

Desde ‘Foro Económico’ indican que “la baja demanda interna en la economía gallega, que solo aporta una décima al crecimiento agregado del PIB”, es el resultado de la contracción del gasto de las familias en un 0,9%, algo que no ocurría desde el primer trimestre de 2021, y de una nueva contracción de la inversión (0,2%).

Las exportaciones se incrementaron un 6% en los últimos 12 meses, casi cuatro puntos por encima de lo estimado para las importaciones. Desde el punto de vista de la oferta, y frente al crecimiento de los grandes sectores en toda España, presenta una contracción tanto el sector primario como la industria manufacturera, con una caída del 2% y del 1,3%, respectivamente.

Valor añadido

Pese a todo, y entre las “luces y sobras” de la economía gallega, el Foro explica que la construcción presenta un mayor dinamismo que en el resto de España, con un crecimiento del 3%, medio punto más que en el conjunto del Estado. Esto a diferencia de lo que ocurre en el sector servicios, donde el valor añadido generado en Galicia crece un 2,4%, frente al 3,7% en la economía española.

Junto a la “debilidad” del crecimiento de la industria manufacturera, el informe también apunta a su baja productividad relativa, que se sitúa en el 75,9% de la media española por puestos de trabajo a tiempo completo y en el 78,7% en horas trabajadas.

Respecto al mercado laboral, el informe asegura que el balance global es “positivo”, pero que presenta “importantes sombras”, ya que Galicia se sitúa entre las comunidades con menores tasas de actividad y ocupación, así como con menor dinamismo en la creación de empleo.

Pese al incremento del PIB en un 2,5%, un punto superior a lo estimado el año anterior, tres de los cuatro indicadores de ocupación presentan tasas de crecimiento notablemente inferiores a las de los 12 meses previos.

Las afiliaciones a la Seguridad Social crecen un 1,8% (una décima más que en el año anterior). Además, la población ocupada aumenta en solo un 0,3% frente al 2,5% de 2023. Así, crecen un 1% los puestos de trabajo equivalente a tiempo completo y un 0,2% en el caso de horas trabajadas (2,1% y 2,7% en el año precedente).

Pese a que la población activa continúa creciendo, este incremento solo ocurre en los hombres, bajando la ocupación en las mujeres, algo que no ocurría desde el primer trimestre de 2021.

Fuente: Revista El Economista 

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